miércoles, 30 de abril de 2014

MARIA DESATANUDOS Es una advocación de la Inmaculada Concepción.Fiesta: 8 de diciembre Patrona de: Matrimonios y Conflictos


Las madres siempre están desatando nudos en el hogar. María Santísima, la mejor de las madres, conoce muy bien los nudos que nos atan a pecados y a problemas que parecen no tener solución. Como la vemos en la pintura, ella desata nuestros nudos. Confiémoslo todo en sus manos. Sobre todo los nudos de la vida conyugal.
Esta devoción comenzó en Augsburgo, Alemania. (en alemán: Maria Knotenlöserin). La pintura original se encuentra en la iglesia de San Peter am Perlach. Es obra de Johann Melchior Georg Schmittdner, del año 1700.
La devoción se ha propagado por todo el mundo, sobre todo en los últimos años en Argentina (Ver abajo).
La pintura nos muestra a La Virgen actuando bajo la fuerza e inspiración del Espíritu Santo que está sobre ella en forma de paloma. Está rodeada de ángeles que le asisten pues ella es la reina. A su izquierda un ángel le alcanza la cinta llena de nudos, a su derecha otro ángel recoge la cinta ya desatada.
La Virgen Desatanudos es una advocación de la Inmaculada Concepción, con la luna bajo sus pies. Ella no solo desata los nudos sino que aplasta con su pié la causa de todos ellos: la maldita serpiente fomentadora del pecado.  En la parte inferior del cuadro, un ángel guía a un hombre por la oscuridad de la vida.
La Virgen quiere ayudarnos pero requiere nuestra humildad para dejarnos llevar de la mano.  Hay que saber que estamos en batalla  espiritual. El demonio no puede contra el Hijo de María, Jesús y anda tras sus otros hijos. ¿Quienes son los hijos de María? La Biblia nos dice: "Entonces despechado contra la Mujer, se fue a hacer la guerra al resto de sus hijos, los que guardan los mandamientos de Dios y mantienen el testimonio de Jesús" Apocalipsis 12,17. Pero mientras seamos hijos fieles el enemigo no podrá vencernos.  La Madre es refugio seguro.
DESATANUDOS EN BUENOS AIRES, ARGENTINA

Parroquia San José del TalarPágina de la parroquia
Calle Navarro 2460,
Barrio de Villa Devoto,
Buenos Aires.  Tel: 4571-8808

 
San José trae a su esposa. El esposo de la Virgen, San José, tiene su parroquia en Buenos Aires: San José del Talar.  Allí quiso llevarse a su esposa María para que fuese honrada. Fue un día inolvidable de gracia
La Virgen Desatanudos fue entronizada en San José del Talar el 8 de diciembre de 1996. Los días ocho de cada mes son mas de 30,000 los los peregrinos, según nos relata el párroco.  Varias otras parroquias Argentinas ya tienen a la Virgen Desatanudos en veneración pública.
Es bien importante saber que muchos brujos esotericos y charlatanes de la Nueva Era utilizan esta advocación de la Santísima Virgen para hacer sus rituales de ocultismo y para supuestamente "atraer" bienestar con dichos rituales usando velas de colores y cosas de esas, sabemos que la Sma Virgen es la madre de Dios e intercesora y esta siempre con nosotros pero siempre seguirá la Voluntad de Dios para nosotros, ella es nuestra madre que nos cuida, no es un amuleto de santería ni cosa parecida asi que como siempre lo mas importante es ser dociles a la voluntad de Dios y ser obedientes con El, nunca salir de Su gracia a travésde los Sacramentos para que la oración de fruto abundante. Bendiciones

sábado, 26 de abril de 2014

El Veneno de la Lengua

CALUMNIA: Acusación hecha a sabiendas de que es falsa.
La calumnia es mentir sobre el carácter de una persona. Quien ha calumniado debe retractarse y hacer reparación del daño hecho, en cuanto sea posible.
La lengua es un arma poderosa. La calumnia usa ese poder para hacer gran daño. 
DIFAMACION
(Latín: diffamāre)

Desacreditar a alguien divulgando algo contra su buena opinión y fama.  El difamador utiliza tanto información verdadera como falsa.  Si es falsa es calumnia. Pero aunque sea verdad lo que dice el difamador comete pecado porque le quita a una persona su derecho del buen nombre.  
No confundir la difamación con la justa denuncia de un mal con el fin de defender al inocente del agresor. Hay que examinar la intención y la finalidad.
CHISME
Comentario (verdadero o falso) que presenta a una persona o grupo en forma negativa. El chisme es pecado aunque lo que se divulgue sea cierto. Es pecado contra la caridad.
Antes de hablar de otro piensa si te gustaría que hablen así de ti.
No hables de alguien que no está presente para defenderse. 

La Biblia nos advierte sobre los pecados de la lengua:
 -          “Yo les digo que en el día del juicio los hombres tendrán que dar cuenta hasta de las palabras ociosas que hayan dicho. Por tus palabras serás declarado justo, y por lo que digas vendrá tu condenación”. (Mateo 12:36-37)
 -          “Ustedes han escuchado que se dijo a sus antepasados  “No matarás” y el que mate deberá responder ante la justicia. Yo les digo más: cualquiera que se enoje contra su hermano comete un delito y el que lo insulte merece ir ante el Tribunal Supremo, y el que lo llame tonto es digno del infierno”.  (Mateo 5:21-22)
 -          “¿No comprenden que todo lo que entra por la boca va a parar al vientre y después sale del cuerpo,  mientras que lo que sale de la boca procede del corazón, y eso es lo que hace impuro al hombre?  En efecto, del corazón proceden los malos deseos, asesinatos, adulterios, inmoralidad sexual, mentiras, chismes.  Esas son las cosas que hacen impuro al hombre”. (Mateo 15:17-21)
 -          “Por la lengua cae el hombre. Que no te llamen calumniador,  porque al ladrón le llega la deshonra, pero la condena será aún más severa para el hombre de doble lengua”. (Sirach 5:11-14)  
 -          “Quien se preste a la calumnia no encontrará descanso ni hallará paz. Muchos han caído por la espada, pero muchos más caerán por la lengua” (Sirach 28:15-18)
 -          “Nada se halla tan oculto que no vaya a ser descubierto, nada escondido que no deba ser conocido. Por eso, todo lo que digan a oscuras será oído de día; y lo que digan al oído en los lugares más retirados, será proclamado sobre los tejados”.
 -            “Hermanos, no se critiquen unos a otros. El que habla en contra de un hermano o juzga mal de él, habla en contra de la ley y juzga en contra de ella. Y si tú juzgas a la ley ya no la cumples, sino que te haces superior a ella. Pero uno solo hizo la ley y a la vez puede juzgar. El que es capaz  de salvar o de condenar.  Pero quién eres tú para juzgar al prójimo?”  (Santiago 4:11-12)
 -          “Arranquen de raíz entre ustedes: los disgustos, los arrebatos, el enojo, los gritos, las ofensas y toda clase de maldad. Por el contrario, muéstrense buenos y comprensivos unos con otros, perdonándose mutuamente, como Dios los perdonó en Cristo”.  (Efesios 4:30)

Mensaje de Jesús a Sor Josefa Menendez
21 de MARZO de 1923

Josefa continúa escribiendo el mensaje de Jesús a las almas, esta vez el Señor se refiere a las ocasiones que debiésemos callar algo pero la lucha interior nos vence:

“…Si algún alma impulsada, no por la caridad y el deseo del bien al prójimo, sino por un secreto movimiento de envidia, procura divulgar una falta ajena, la gracia y la conciencia levantan la voz y le dicen que aquello es una injusticia, y que no procede de bueno sino de mal espíritu. Quizá tenga un instante de lucha interior pero, cobarde al fin, su pasión inmortificada la ciega y procura inventar un arreglo que, a la vez, acalle su conciencia y satisfaga su mala inclinación: esto es, acallar en parte lo que debía callar del todo; y se excusa diciendo: `tiene que saberlo… sólo diré una palabra…´”.

Las plumas regadas
Una mujer fue a confesarse con San Felipe Neri acusándose de haber hablado mal de algunas personas. El santo la absolvió, y le puso como penitencia que tomara una gallina y volviera donde él desplumándola poco a poco a lo largo del camino. Cuando estuvo de nuevo ante él, le dijo: "Ahora vuelve a casa y recoge una por una las plumas que has dejado caer cuando venías hacia aquí". La mujer le mostró la imposibilidad: el viento las había dispersado. Ahí es donde quería llegar San Felipe. "Ya ves -le dijo- que es imposible recoger las plumas una vez que se las ha llevado el viento, igual que es imposible retirar murmuraciones y calumnias una vez que han salido de la boca".
UN TESTIMONIO IMPORTANTE

El actor ingles Alec Guinness, católico converso, famoso por interpretar al maestro Jedi Obi Wan en la primera película de Star Wars, sabía que este pecado era uno de sus puntos débiles como cristiano. 

Para combatirlo, contaba con un aliado: San Francisco de Sales, patrón de escritores y periodistas, cuyos consejos contra "los pecados de la lengua" leía y releía. 

Para no dañar con las palabras
Guinness tenía una innegable capacidad para hacer daño a la gente con comentarios hirientes, y debía inspirarse en las palabras de este santo obispo y escritor en su lucha desigual por no decir más mofas y ofensas, “el peor pecado de la lengua que podemos cometer contra nuestro hermano”, según el santo obispo de Ginebra. 

Guinness veía a Francisco de Sales como un santo práctico, con métodos aplicables. “Voy y vengo y vuelvo a empezar en mi vida religiosa, pero profundizo, me parece, y rezo y confío”, diría a un amigo esos días.

Un converso en un mundo de apariencias
En 2005 apareció en inglés la biografía oficial del actor británicoAlec Guinness, fallecido el año 2000. 

Guinness ha sido ya ídolo de dos generaciones por su papel del maestro jedi Obi Wan Kenobi en La Guerra de las Galaxias, pero antes ya se había hecho un enorme prestigio en el mundo del cine, con un Óscar en 1957 por su papel en El puente sobre el Río Kwai

El biógrafo, Piers Paul Read, presta en esta obra (Alec Guinnes: the authorized biography), una atención especial a la fe católica del actor, la fe de un converso en la que siempre encontró consuelo y crecimiento. 

Hijo de madre soltera y bebedora
La infancia de Guinness no fue fácil: nació en Londres en 1914, nunca supo quién fue su padre y vivía en pensiones con una madre que apenas se preocupaba de él. 

“Mi madre era una puta”, diría con dureza Guinness a John le Carré

“Se acostó con toda la tripulación del yate de Lord Moyne en la Regata Cowes y cuando dio a luz llamó Guinness al bastardo pero mi padre fue probablemente el maldito cocinero”. 

Era bebedora y robaba cosas. Como reacción a esta infancia, cuando años después Guinness triunfe, desarrollará un cierto dandismo, un puntillismo famoso en círculos artísticos y un gusto por los trajes elegantes y las compras exquisitas. 

Controlar la homosexualidad mediante la oración
En su época de estudiante Guinness conoció los ambientes turbios de la homosexualidad e incluso experimentó inclinaciones en este sentido, aunque parece ser que las resistió. 

El biógrafo recoge su amistad con el director Peter Glenville, un católico convencido, que sin embargo mantuvo una relación homosexual de por vida a la vez que reconocía la necesidad de confesarlo, arrepentirse y seguir la enseñanza de la Iglesia. 

Guinness escribió que este tipo de pasiones “podían controlarse, si no curarse, mediante la oración, el arrepentimiento y la Gracia de Dios”. 

Tras la escuela, trabajó un año en una firma publicitaria y después empezó a formarse como actor. En 1934 John Gielgudpuso en marcha su exitosa carrera con el papel de Osric enHamlet

El catolicismo, “regimiento de élite”
Durante la Segunda Guerra Mundial Guinness adoptó el anglocatolicismo, la rama ritualmente más parecido al catolicismo de la Iglesia Anglicana. 

En aquella época, los anglicanos no ordenaban mujeres ni casaban homosexuales y la doctrina era muy cercana a la católica. 

Según escribió, la religión anglicana era “un baluarte psicológico contra las incertidumbres de la guerra y el miedo al futuro y me mantuvo por el buen camino”. 

Incluso, después de casarse, jugó un tiempo con la idea de hacerse sacerdote anglicano. Pero ya entonces, en los años de la guerra, siendo oficial en la Royal Navy, consideraba que el catolicismo era “el regimiento de élite” del que pensaba que no podía permitirse sus “caros uniformes”.


Alec Guinness ataviado como el Padre Brown
en la serie de TV británica clásica

La sotana que inspiraba confianza
 
Una escena especial se dio en su vida cuando rodaba un capítulo de El Padre Brown, serie de TV inspirada en las novelas de G.K. Chesterton, y él estaba vestido como el famoso sacerdote. Paseaba al aire libre durante un descanso, y una niña pequeña se le acercó corriendo, muy confiada. 

Para ella, él era simplemente un sacerdote con sotana, y la niña al parecer tenía muy buena experiencia de los curas y le inspiraban una gran confianza y simpatía. Aquello hizo pensar a Guinness, aún anglicano, en como la mera sotana había bastado para aportar alegría y confianza a una niña desconocida.

Un pacto con Dios
A los cuarenta años Guinness escribe en su diario: “mi alma, mi cuerpo, mi cerebro languidecen necesitando religión. El mundo es demasiado inhóspito e inexpresivo sin un sentido de adoración”. 

Cuando su hijo Matthew cayó enfermo de poliomelitis,Guinness hizo el pacto con Dios de convertirse si el chico se recobraba: Matthew se curó y Guinness se convirtió. 

Así lo explica en su autobiografía Blessings in Disguise (1985), aunque Piers Paul Read y otros señalan que fue en realidad un paso más en un deseo lento pero tenaz de vivir y crecer en fe. 

La visión mística de Santa Juliana
A partir de ese momento, Guinness devorará las obras espirituales del cardenal Newman, de Chesterton, de Hilaire Belloc, de Knox, de Carlos de Foucauld y de santa Teresa de Ávila

En uno de sus diarios apunta un pasaje de las Revelaciones del Amor Divino, una de las visiones de la beata medieval Juliana de Norwich: Vi una cosa pequeñita en la palma de mi mano, del tamaño de una avellana, redonda como una bolita. Pensé, ¿qué será esto? Y se me respondió: “esto es todo lo que ha sido hecho”. Me maravilló como podía mantenerse y no caer en la inexistencia por su pequeñez. Se me respondió:“se mantiene, y se mantendrá siempre, porque Dios lo ama”. 

A Guinness le cautivó esta visión y en su caja de maquillaje llevaba siempre una avellana, que era lo primero que sacaba y ponía en la mesa del camerino al llegar a un teatro. 

Una caricia de Dios
Alec Guinness también creía que Dios permitía que cada hombre y mujer, alguna vez, recibieran “de acuerdo a su capacidad, un destello de Su promesa a ellos, una impresión de lo que la eternidad podría significar, un destello de su adopción como Hijos de Dios y al retirarse este destello, darse cuenta de lo que significa la Caída del Hombre. Se nos deja con una sensación exultante y al mismo tiempo, junto con su felicidad, una tristeza que es difícil que volvamos a encontrar en esta vida. Es una zanahoria dorada ante unos burros... que podrían ser dioses”. 

Destello de eternidad
Párrafos como este, que podemos encontrar en otros grandes cristianos ingleses de esos años, como C.S.Lewis o J.R.R.Tolkien acercan la experiencia mística, el “destello de eternidad”, a los hombres. No es extraño que estos artistas hayan llegado a tantos lectores y espectadores. 

Consciente de sus fallos
Guinness era muy consciente de sus pecados y fallos, “dolorosos, cuando no ridículos o aburridamente repetitivos”. Fue consciente de sus fallos y de hecho la mayoría de sus papeles en cine o teatro trataban el tema del fracaso, fuese como soldado o espía, oficinista o vendendor, científico o noble en desgracia. En su vida espiritual, su reconocimiento de esta debilidad y su dependencia de los sacramentos fortaleció su fe. 

Una mujer de bandera
Guinness fue amigo de sus amigos, generoso y fiel a su esposa. Sin embargo, siempre se mostró desdeñoso e hiriente con cosas que eran valiosas para ella, sus libros infantiles, sus ilustraciones, su cocina. 

Su esposa Merula veía estos fallos como resultado de su dandismo compulsivo y los perdonaba

“Según unos cuantos de sus amigos más cercanos, mientras Alec mantenía su viejo y difícil yo, era Merula quien ganaba en sabiduría y bondad, adquiriendo el genio de la santidad que había eludido a Alec”, escribe en esta biografía Piers Paul Read

Un palmarés impresionante
“Con todas las contradicciones de su maquillaje, siempre hubo un núcleo de verdad allí en el medio que fue lo que reconocí cuando nos enamoramos por primera vez. Supe que siempre podría confiar en él”, escribió Merula tras la muerte de su esposo, una de las figuras públicas más conocidas del catolicismo público inglés en el arte del s.XX. 

En su palmarés quedaba el Oscar de 1957 al mejor actor y un Globo de Oro por El puente sobre el río Kwai; el premio honorífico de la Academia en 1980 por su contribución cine; sus nominaciones al Oscar como actor principal por The Lavender Hill Mob en 1951, y también las nominaciones como actor de reparto por La guerra de las galaxias en 1977 y Little Dorrit en 1988.

jueves, 24 de abril de 2014

Testimonio de conversión en Medjugorje, tras ser asediado por jugar la tabla ouija

Fuente: Religión en libertad
Guillermo Ortea llevaba una vida aparentemente normal. Casado y padre de cuatro hijos, nada hacía suponer que los problemas que acontecían en su vida y que poco a poco iban minando a la familia, podían tener un origen diabólico, camuflado en lo que parecía un sencillo e inofensivo juego de adolescentes: la tabla ouija. 

El último fin de semana de marzo de 2014 Guillermo Ortea contó su experiencia personal ante numerosos jóvenes y padres de familia en Barcelona y Gerona, advirtiendo de los peligros de las prácticas espiritistas. 

Él mismo cuenta que hasta quince años después de sus juegos con la ouija no se dio cuenta de que sufría de una influencia demoníaca que afectaba a todos los ámbitos de su vida, hasta llevarle al límite de la desesperación tanto a él como a sus familiares. Ahora da sus testimonio para advertir a los jóvenes que estas prácticas espiritistas no son ningún juego inofensivo.



-Guillermo, eres una persona de oración. En tu casa, a día de hoy, no pasa el día que tu esposa y tú no recéis juntos el rosario. ¿Has sido siempre así?

-No, ni de lejos. Esto es muy reciente. He pasado 35 años de mi vida no teniendo nada presente a Dios. O al menos, muy poco. La familia de la que vengo, en la que soy hijo único, no ha tenido en la fe un referente vital. Tal vez sí cultural, pero no vivencial, como ahora.

-¿Cual es la diferencia entre esa fe cultural y una fe vivencial?
-Rezar con el corazón. Eso marca la diferencia. Una cosa es hacerlo por costumbre, por cultura, por tradición, incluso por obligación, y otra es tener una relación viva, diaria, con Cristo.Tener presente a Dios en todas las cosas de tu vida, no solo los domingos. Para mí, el sentimiento religioso no existió nunca, ni al hacer la Primera Comunión ni nada. Eso empezó a cambiar hace apenas dos años, estando ya casado y teniendo cuanto hijos. Lo aprendí, o mejor dicho, lo recibí, en una peregrinación a Medjugorje.

-¿Antes de esa peregrinación, ibas a a Misa con tu mujer o te confesabas?
-Iba a Misa los domingos porque mi mujer se empeñaba, y a mí me salía más barato ir que pelearme con ella, pero era el primero en salir de la iglesia, nunca me enteraba de nada y lo que dices deconfesarme, desde los tiempos del colegio fue algo que no hice salvo para alguno de los bautizos de mis hijos, que también viví de forma cultural. Me hubiese dado lo mismo bautizarlos cristianamente que bautiarlos por el rito hindú.

-¿Fuiste entonces a un colegio religioso?
-Sí, y curiosamente ahí se originaron mis problemas. Fuí a un colegio católico, muy conocido en Barcelona. Mis padres, que no eran personas religiosas, me llevaron ahí con 13 años para ver si me centraba. A esa edad yo ya me distraía demasiado con las chicas y con otras cosas y querían algo más estricto para mí.

-¿Por qué dices que tal vez ahí empezaron tus problemas?
-Porque fue en una de las convivencias para chicos que se organizaban en el colegio donde mi grupo de amigos y yo hicimos el idiota, pero prefiero contártelo más tarde, es importante seguir un orden.

-De acuerdo, tú mismo.
-Cuando mi mujer y yo nos casamos estábamos muy enamorados. Ahora creo que lo estamos más, pero el camino ha sido muy doloroso. Yo diría que incluso hemos llegado al borde, al límite de la separación, lo cual para mí creo que hubiese sido fatal. Me hubiese desesperado y posiblemente no estaría aquí contandote mi vida.

-¿Por qué llegasteis a esa situación?
-Por mi comportamiento inmaduro e ilógico, absurdo en muchísimas cuestiones sin importancia del día a día, y en otras muchas que sí que la tenían. Yo no estaba centrado en mi vida, en atender a mi mujer y mis hijos y siempre estaba distraído con cualquier cosa que me apeteciese a mí

»Esto poco a poco te va separando de la familia, huyes de tus responsabilidades, y llegamos un poco al límite cuando nació nuestra cuarta hija, porque nació con una enfermedad severa, lo que que te exige mucho más, y yo sin embargo, empecé a dar mucho menos. Me escondía.

-¿Cómo salisteis adelante?
-Mis suegros percibieron que estábamos llegando a una situación límite. Ellos ya vieron que sus rezos se estaban agotando sin que se remediase nada en nosotros y nos ofrecieron, como recurso de emergencia, ir a Medjugorje.

-¿Qué pensaste tú cuando te lo ofrecieron?
-Yo dije a mi mujer: “Perdona, pero yo no voy a dedicar mis vacaciones a estar en un convento ni nada así. No me da la gana, no me fastidies. ¿A qué voy a ir a Medjugorje? ¿Pero eso qué es?”.

- ¿Cómo es que fuiste, entonces?
-Por respeto a mis suegros. Ellos estaban preocupados, y son unas personas que nos quieren mucho. A su hija por supuesto, pero yo sé que a mí también me quieren mucho, y ya que me ofrecían algo por ayudarme, me sabía mal despreciarles. Acepté ir con mi hija Elena. Si Dios existía, que me lo demostrase curándola a ella.

-¿Qué pasó en Medjugorje?
-La pregunta sería mejor qué no pasó en Medjugorje, pero bueno, voy a tratar de resumir aquel segundo día allí.



-Adelante

-Mi mujer se quiso confesar y fuimos hacia la parroquia. Cuando salió del confesionario fuimos dentro de la iglesia para oír Misa. Esto era durante el Festival de Jóvenes de Medjugorje y el día anterior habíamos oído Misa en la explanada, pero ese día decidimos quedarnos allí dentro, atrás del todo. 

»De repente entró una monja en la iglesia, una señora muy delgadita, con el pelo grisáceo, con una rebeca azul, una camisa grisácea y una falda larga de tubo, también azul. Tendría unos cincuenta años y su cara era muy dulce. Transmitía mucha paz. Se sentó al lado de Elenita y empezó a jugar con ella. La peque se quiso sentar en ella. Yo lo intenté evitar pero esta señora dijo que no pasaba nada, y así estuvieron toda la Misa. Había cierta comunicación entre ellas y a Elenita se le notaba estar a gusto a su lado

»Cuando llegó el momento de ir a comulgar, la monja, en italiano, sin venir a cuento, nos dice: “Vuestra hija no está enferma”. Yo me quedé como aturdido, porque se me juntaron demasiados pensamientos en la cabeza. Primero, quien eres tú para decirme a mí que mi hija no está enferma. Pero al mismo tiempo hubo sorpresa, porque ella no tenía por qué saber que mi hija tiene lo que tiene, ya que no se le nota a no ser que le de un episodio de epilepsia, que no fue el caso.

»Cuando pude reaccionar, le dije: “Mire señora, sí que lo está”. Pero insistió: “No, no está enferma. La niña tiene un bloqueo. Hay algo oculto que la bloquea”. Yo empecé a pensar que la mitad de aquel pueblo estaba loco. Se me hizo un nudo en la cabeza, de verdad. Me sentó mal, pero al mismo tiempo pensaba muy rápido sobre por qué esta señora nos decía esto. Entonces ella insistió: “Vuestra hija está sana. He rezado por ella durante la Misa y he percibido algo que no me gusta. Cuando volváis a casa llevadla a vuestro párroco y que haga una oración de liberación por ella. En un futuro, sanará. Creedme, que sé de lo que hablo”. Entonces, cambió el semblante, se pudo seria y nos preguntó a mi mujer y a mí:”¿Habéis hecho algún tipo de magia, espiritismo o habéis jugado con la güija o algo así?”.

-¿Os sentisteis incómodos?
-¡Por supuesto! Nos hizo preguntas fuera de lugar. Yo pensé que había sido un error ir a ese sitio. Yo no estaba preparado para ese episodio, pero no fue nada con lo que vino a continuación.

-¿Qué fue?
-Comulgamos y en cuanto nos dieron la bendición nos marchamos. Sabes que en la iglesia de Medjugorje hay un espacio entre la puerta del templo y la puerta de la calle, donde están colocadas las pilas de agua bendita y las revistas de la parroquia. Tal vez tardas cinco segundos en atravesarlo.

-Sí, así es
-En ese tramo, en ese lugar, a mí se me abren unos recuerdos en mi cabeza que yo tenía absolutamente olvidados, y de repente veo con toda claridad una serie de imágenes, como en flashes en mi cabeza, de mi época del colegio, con unos trece años, haciendo espiritismo con una güija.

-¿Puedes describir con detalle lo que viste?
-Perfectamente. Fueron unos recuerdos muy nítidos, que me vinieron de golpe, y que yo no había recordado jamás en mi vida, desde no sé cuando. Estaba yo con un grupo de compañeros del colegio, en una de sus casas de convivencias, alrededor de una güija que habíamos fabricado nosotros. Recuerdo que lo hicimos porque nos aburríamos, y no fue una sola vez, sino más veces. Era algo en cierta manera habitual. Pero sí que recuerdo que la primera vez fue en una de esas convivencias. De hecho, recuerdo las caras de las personas que estábamos allí.

-¿Qué recuerdas en cuanto a sensaciones?
-Recuerdo el morbo por lo desconocido, por lo prohibido, la curiosidad del adolescente ante lo peligroso. Recuerdo que aquel vaso se movió, pero yo ya no sabría decirte si lo movía yo o si se movía solo, y no te puedo dar muchos más detalles. Al mismo tiempo que esto se me revela en la cabeza, me acuerdo de algo que me asustó, y es verme a mí mismo haciendo güija, yo solo en mi casa, con una tabla que me fabriqué después yo mismo. Se me ponen ahora los pelos de punta.

-Guillermo, de todo esto que me cuentas, ¿no te acordabas de nada?
-Cero. Jamás. Nunca. Algo pasó alguna vez que me hizo olvidarlo todo. Y de repente, lo veo tan nítido como cualquier recuerdo de cosas que he hecho esta mañana. Fue un recuerdo que aglutinaba todas las veces que había hecho aquello, que no fueron dos o tres, fueron muchas, con relativa frecuencia, de manera muy inocente, por curiosidad, por pasar el rato, sin ninguna intención extraña. No sé, supongo que cuando eres adolescente buscas divertirte de cualquier manera y nunca nadie nos advirtió del peligro que eso conllevaba. No sabíamos ni de lejos lo serio que es este problema.

-¿Recuerdas cuando dejaste de hacer aquello?
-Yo hice güija con frecuencia los años que fui alumno de este colegio, que fue entre los trece y los dieciocho. No volví a hacerlo más y ni siquiera me acordé. Es como si me hubiesen cortado esos recuerdos de golpe al mismo tiempo que el interés por hacerlo. Pasó algo que me cortó la conciencia de haberlo hecho, pero no sé qué fue. No me volví a acordar hasta ese día en Medjugorje, en el momento en que salgo de esa iglesia.

-¿Cómo reaccionaste?
-Me puse literalmente malo. Me entró un sudor muy frío, se me aceleró el corazón y me temblaron las piernas. No es una forma de hablar, sino que literalmente casi me caigo. Salí de allí en estado de shock. Tuve que sentarme porque justo a continuación de recordar todo eso, tomé conciencia enseguida de que a mí me pasaba algo que tenía que ver con aquello, que los comportamientos tan extraños que he tenido siempre con mi familia, vienen de aquello. 

»Que hay muchas cosas que he hecho muy mal y que yo no sabía por qué las hacía, cosas que me descentraban de lo que realmente era importante en mi vida. Tomé conciencia de que había algo en mí como que me gobernaba más que yo, haciéndome tomar decisiones erróneas y haciendo que me comportara de manera equivocada. Entonces me di cuenta, allí sentado en la puerta de la parroquia, y sentí algo así como que Dios, o la Virgen, o quien fuese, como que me decía: “Guillermo, no es tu hija quien necesita ayuda, sino tú.Déjala a ella que está muy bien cuidada y ocúpate de arreglar lo tuyo”.

-¿Qué es "lo tuyo"?
-Yo he tenido algún tipo de influencia diabólica en algún grado. No creo que haya sido una posesión, pero sí he vivido bajo la influencia severa del Demonio durante años. En Medjugorje, gracias a Dios, la Virgen empezó a poner orden en mi desordenada vida, empezando por darme a conocer cual era mi problema, y el de mi familia. A partir de Medjugorje he ido conociendo verdades de nuestra fe, tan desconocidas incluso para los católicos en el seno de la Iglesia, que al principio te descuadran, pero que luego son muy ordinarias.

-¿A qué tipo de verdades te refieres?
-Hay muchas cosas que pensamos que no son verdad, y que sí que lo son. Por ejemplo, los dones del Espíritu Santo, esos de los que habla San Pablo. No son una manera bonita de hablar. Existen y si te abres a Él y le invocas con fe, se te dan. Son cosas que no se ven, como lo que nos pasó con esta religiosa en la iglesia.

-¿Dormiste aquella noche?
-¿Cómo voy a dormir? Es imposible. No pegué ojo. El cuerpo se resiente de tantos impactos en un solo día. Es como que se tiene que adaptar a las realidades del espíritu.

-¿Como estabas el día siguiente?
-El día siguiente mi estado era flotar.

-¿A qué te refieres?
-A que yo voy flotando. De repente la vida me pareció tan maravillosa, que parecía que mi cuerpo me pesaba poco. No se qué me pasaba, pero vi la vida como un don precioso, y empecé a rezar.

-Bueno, ya habías rezado un poco los días de antes.
-Yo no había rezado en mi vida. Ahí me di cuenta de lo que era rezar. En Medjugorje la oración te brota a raudales, no lo puedes parar. Es como respirar, una presencia de Dios constante, casi tangible. Como no sabes muy bien qué hacer con ese deseo, pues yo empecé a rezar rosarios, y no se cuantos pude rezar ese día. Fue maravilloso rezar sin esfuerzo. A mí siempre me había costado tanto, y de repente yo rezaba con la misma facilidad con la que das pasos al andar. Así pasé el resto de días en Medjugorje, flotando, rezando y feliz. Conociendo una felicidad nueva. Y así, volvimos a Barcelona.

-¿Qué reflexiones haces una vez que llegas a casa?
-Poco a poco fue pasando el tiempo y de una manera nítida me doy cuenta de que quien necesita ayuda de Dios no es Elenita. Ella es un ángel que nos ha enviado Dios, a la que Dios quiere mucho tal y como es, y que quien más bien necesita un milagro, soy yo. Me doy cuenta también de que nosotros no vivíamos la fe como debíamos vivirla. Al regresar a Barcelonacomenzamos a vivir la fe desde una postura apostólica y evangelizadora en la que yo no me reconocía. O al menos, no me ubicaba para nada sabiendo como era apenas unos días antes. La vida te da la vuelta.



-¿Sabrías decirme qué diferencia ves tú, desde tu perspectiva de cristiano que deja la fe y luego es converso, la diferencia entre rezar y orar?
-Creo que rezar es recitar unas oraciones y orar es ponerse en presencia de Dios. Compartir con Dios tu vida familiar. Eso es lo que empezamos a hacer a la vuelta de Medjugorje. Metimos a Dios en casa. Desde la vuelta de Medjugorje la vida en casa ha cambiado. Ante cualquier tesitura, nuestra actitud, la de mi mujer y la mía, es otra. Es diferente, y es que de verdad yo siento que a mí me han cambiado. 

-¿Cómo afrontasteis el tema de tus sesiones de güija?
-Empezamos a hacer oraciones de liberación. No exorcismos, pues es diferente, y el exorcismo requiere de una liturgia especial oficiada por un exorcista, pero sí pequeñas oraciones en las que implorábamos a Dios mi liberación, o la de aquellos que la necesitaran en mi familia. Entonces mi suegra me recomendó hacer un retiro, unos ejercicios espirituales dirigidos por el padre Ghislain Roy, un sacerdote canadiense que sabe de esto.

-¿A qué te refieres con lo de que ese padre Ghislain sabe de esto?
-El padre Ghislain es un sacerdote canadiense que posee una serie de dones que se han manifestado a lo largo de su vida sacerdotal, cosas extrañas incluso para la inmensa mayoría de los católicos, pero que están todas ellas descritas en la Palabra. Una de estas cosas es el descanso en el Espíritu. 

-¿Qué es un descanso en el Espíritu?
-Pues yo no te se explicar realmente lo que es, pero yo viví un descanso de unos treinta minutos.

-No sé si eso es mucho o poco...
-Pues es una barbaridad. No suelen durar más de unos diez minutos, como mucho.

-¿Puedes relatar lo que viviste?
-Claro, no es nada raro, aunque ya sé que para muchos lo parece. Verás. El sacerdote te impone las manos y ora por ti. Entonces, Dios obra en ti de una manera sensible a los sentidos. Tal es así que te caes al suelo. Tu cuerpo se debilita y sin perder la consciencia, vives una experiencia en la que sin dejar de estar en la Tierra, tu espíritu, tu alma, saborea de alguna manera a Dios.

-¿Es algo parecido a lo que santa Teresa llamaba un arrobamiento?
-No lo sé. Podría ser.

-¿Dices que esto es normal?
-Sí. Lo anormal es que los sacerdotes no crean el poder del que disponen por el Orden Sacerdotal. Los sacerdotes tienen mucho poder. Si me apuras, y sin comparar lo que una y otra cosa son, pero más raro es lo que sucede en la transubstanciación, que un pedazo de pan se convierte en Cristo, y a todo el mundo le parece normal. Supongo que será cuestión de costumbres o educación, pero esto es así.

-De acuerdo. Sigue con tu descanso.
-Cuando el padre Ghislain me impuso sus manos y oró en silencio, yo caí hacia atrás. Entré en un estado en el que como te he dicho, no llegas a estar inconsciente, pero al mismo tiempo recibes una percepción más amplia de las cosas. No se queda en la percepción física de los sentidos, sino que va un poco más allá. Los trasciende y ves cosas que pasan en tu interior, en tu alma.

-Suena a rollo esotérico.
-Esotérico y demoniaco fue la güija. Esto es de Dios. Yo lo llamaría místico. Nuestra historia como católicos está repleta deexperiencias místicas en las vidas de los santos, por las que precisamente les hicieron la vida imposible, y luego ya ves. Son manifestaciones de Dios a través de sus elegidos. En este caso, a través de este sacerdote. 

-¿Cómo acabó esta experiencia?
-Yo estaba tumbado y empecé a ver como empezaban a salir hacia fuera de mí unas manchas negras, como nubarrones, que se iban hacia una luz que había encima de mí. Allí se disolvían. Yo esto lo veía mientras vivía una sensación de mucha calma, de mucho bienestar. Me pregunté que sería todo aquello, y lo interpreté como que era porquería o algo así que había en mí. Así un buen rato hasta que aquello dejó de salir e hice un ademán como de levantarme, pero el padre me lo impidió y me dijo: “No te levantes aún. Quédate ahí y deja que el Señor llegue a ti”. Me volví atrás y en unos tres segundos comenzó una segunda oleada. Ahí tuve una conciencia mucho más clara de que el Señor me estaba limpiando, así que esta vez me dejé hacer a conciencia. Llegó un momento que me encontraba tan bien, que tenía tal sensación de paz y de alegría al mismo tiempo, que yo pensé: “Señor, déjame ver a la Virgen. ¿Puedo verla ya?”. Pero no la vi. Creo que lo que yo viví es una antesala del Cielo, pero no me morí. Aquello acabó, me levanté y me marché.

-Dice la Palabra que cosas sorprendentes veremos si tenemos fe.
-En ese retiro se ven estas cosas. En Medjugorje también. Creo que en este retiro yo quedé liberado de lo que a mí me pasase, que llevaba arrastrando desde mi adolescencia, cuando al jugar con la güija abrí la puerta a la parte oscura de nuestra realidad trascendente, y luego, en verdad, nunca se la abrí a la parte buena, y ahí quedé atrapado. Jugar con la güija es como meter una bala en el tambor de una pistola y dejar espacios libres. Puede que no pase nada, o puede que sí.Si pasa tendrá conceciencias fatales.

-Una vez que ha pasado tanto tiempo, ¿qué recuerdas de Medjugorje? ¿Qué dirías si un desconocido te preguntases qué es lo que te sorprendió de allí, fuera de tu experiencia tan íntima?
-Que allí no te cuesta nada ponerte en presencia de Dios. Es como un cielo terrenal. Ambas realidades se solapan. Allí no te cuesta nada rezar ni ir a Misa.Cuando digo nada, es nada. Allí tu ser desea rezar, desea ir a Misa. Allí tu ser toma conciencia sensible al cuerpo de tu neecsidad de Dios. Yo esto no lo había visto nunca antes, ni nadie me lo había explicado. Allí pasa algo.

-¿Qué?
-Allí pasa lo que la Virgen quiere que te pase, y lo que tú la dejes hacer. Allí tú llegas y de primeras no pasa nada, pero en un momento dado, cuando quieres darte cuenta, es como si hubiese un parón en el tiempo, en el que entras y como que todas tus inquietudes, tus angustias, se quedan a un lado temporalmente, como congeladas. Así te da tiempo a detenerte en lo realmente importante en tu vida, que es dónde está Dios. Te da tiempo así a conocerle, un poquito, y cuando todo recobra su velocidad normal, tú ya has cambiado. 

»De hecho, una vez que regresas a casa, puede ser muy duro, porque regresas a una realidad repleta de cruz, y allí como que se ha quedado un poco a parte. Vuelves a la realidad limitada temporal de la que de alguna manera has salido por un tiempo. Pero es muy importante dejarte hacer, ponerte esos días en manos de Dios con el corazón abierto. Con confianza. Allí no hay cruz. Allí hay alegría. Allí no hay gente con mal humor, ni malas caras. En Medjugorje se crea una comunidad brutal entre miles de personas que solo desean el bien, un bien que conocen y que reconocen que viene de Dios, y conocen la manera de importarlo a sus vidas. Allí la vida no cuesta.

-¿Te sigue siendo fácil rezar?
-Sí, me es mucho más fácil que antes de ir a Medjugorje. Ya te dije que para mí, ir a Misa, era una tortura. Y orar, hablar con Dios, con Cristo... ahora es tan normal... Es como si hubiera conocido a un amigo nuevo, con el que más te gusta estar, con el que más te gusta compartir. Un amigo divino que está a la altura de los hombres. Es brutal.

-Ahora que le conoces y que le quieres dar a conocer, ¿quien dirías que es Dios?
-Dios es amor. Un amor enorme con el que puedes hablar y nunca pone mala cara.

-Guillermo, quiero hacer una reflexión contigo en este momento. Tú estudiaste en un colegio católico y te dedicabas a jugar con la güija. En España, algo se ha hecho muy mal para que habiendo tenido tan fácil la evangelización, haya tanta gente tan alejada de la Iglesia. ¿qué hemos hecho tan mal?
-Yo creo que nos han contado mal a Dios, lo hemos explicado mal. Durante muchos años no se ha contado bien cómo ni quien es Dios. La imagen que a mí me vendieron de Dios era falsa. Si me lo hubiesen presentado bien, tal vez no habría necesitado ir a Medjugorje, pero me lo contaron mal.

-¿Por qué? Quiero decir, que no sería con mala intención.
-Claro que no. Sencillamente se ha explicado mal a Dios porque no se le conocía. Si no conoces a Cristo no puedes presentarle.Necesitas vivir una experiencia que se llama encuentro personal con Cristo, en el que estáis solos tú y Él, sin nadie más que te contamine ni te distorsione, ni a favor ni en contra. Si le conoces ahí, ya podrás vivir tu experiencia de fe, no la que te contaron otros. Yo ya le he conocido, y con todo lo pecador que llego a ser, doy testimonio de Cristo, porque le he conocido.

-¿Por qué das testimonio?
-Yo doy mi testimonio porque la Virgen pide en Medjugorje que demos testimonio absoluto, y yo tengo una deuda muy grande. Me tomo muy en serio eso de encontrarme delante de Dios y que su primera pregunta sea: “Después de todo esto, ¿qué has hecho? ¿A quien se los has contado? ¿A tu familia y ya está? ¿Yo te enseño el cielo y tu lo metes en una lata?”. La Virgen dice en Medjugorje: “Yo busco apóstoles de hoy que transmitan la luz de Dios”. Lo que nos viene a decir esto es que ella busca gente dispuesta, que ella necesita reclutar gente que se ofrezca, porque somos muy duros y cuando consigue tocar el corazón de uno solo de nosotros, porque se ofrece, necesita que lo cuente.

-¿Cómo está Elena?
-Elena está mucho mejor. No curada, pero mucho mejor. Voy a contarte algo de ella. Cuando mi mujer se quedó embarazada, no la aceptamos bien. Era la cuarta y cayó como un jarro de agua fría. ¡Dios mío, qué error! No entraba en nuestros planes, rompía la carrera profesional de mi mujer. Hubo un rebote importante. Ahora sabemos que ella ha sido el ángel que nos ha enviado Dios para poder conocerle. Es el ángel que nos ha dado Dios para que mi familia siga unida y para llevarnos a Medjugorje. Elenita no necesitaba nada. Ella es así y Dios la quiere así y la quería así porque sabía que lo que mas necesitábamos nosotros era a Elenita, así. Él lo ha querido. Que ella se cura, fantástico. Que no se cura, fantástico también. Ella está cumpliendo en la tierra su misión, que es querernos desde su enfermedad y dejarse querer por nosotros.

Puede leer el testimonio de Guillermo íntegro en el libroEstamos de vuelta (ed. Libros libres).

Posición Sobre Garabandal: Carta de Franjo Seper, Prefecto de la Sagrada Congregación para la Doctrina de la Fe, al arzobispo Philip M. Hannan de Nueva Orleans, Louisiana.

21 de abril de 1970

“Esta oficina ha recibido la carta de abril de 1970 en la que usted expresó una aprehensión justificable sobre la difusión del movimiento de Garabandal en la Arquidiócesis y acerca del cual  usted solicitó directrices claras y fiables de la Santa Sede para hacer frente a este fenómeno.

“La Santa Sede comparte su percepción sobre el manifiesto movimiento y el aumento de la confusión debido a la difusión de este entre los fieles, y desea con esta carta aclarar su posición al respecto.”

“Esta Sagrada Congregación hace constar que a solicitud de varios Obispos y fieles, siempre se ha negado a definir el carácter sobrenatural de los acontecimientos de Garabandal. Después del juicio negativo definitivo emitido por la Curia de Santander, esta Sagrada Congregación, después de un examen atento enviado a esta oficina acerca de las investigaciones , con frecuencia ha elogiado la prudencia que caracteriza el método seguido en el examen, y por lo mismo ha decidido dejar la responsabilidad directa de la cuestión al Ordinario del lugar.

“La Santa Sede siempre ha sostenido que las conclusiones y las disposiciones del Obispo de Santander eran directrices suficientemente seguras para el pueblo cristiano, asimismo las indicaciones de los Obispos a fin de disuadir a las personas de participar en peregrinaciones y otros actos de devoción basados en las supuestas apariciones y mensajes de Garabandal.

El 10 de marzo de 1966, la Sagrada Congregación escribió una carta en estos términos al obispo de Santander, que también había pedido una declaración más explícita de la Santa Sede al respecto.

“Sin embargo los promotores del movimiento de Garabandal han tratado de minimizar las decisiones y la jurisdicción del obispo de Santander. ESTA CONGREGACIÓN quiere que se entienda claramente que el obispo de Santander, ha sido y sigue siendo el único con JURISDICCIÓN COMPLETA EN ESTE MATERIA, Y LA SANTA SEDE no tiene intención de examinar esta cuestión más lejos, ya que sostiene que los exámenes ya realizados son suficientes, así como son las declaraciones oficiales del Obispo de Santander.

No hay nada de cierto en la afirmación de que la Santa Sede ha nombrado a un investigador privado del caso de Garabandal y las afirmaciones atribuidas al personaje anónimo en la medida en que la verificación de las apariciones de Garabandal está completamente en manos del Santo Padre, Papa Pablo VI, y otras expresiones que apuntan a socavar la autoridad de la decisiones del Obispo de Santander son completamente infundadas.

“Con el fin de responder a ciertas dudas que usted expresó en su carta de esta Sagrada Congregación desea afirmar: Que la Santa Sede no ha aprobado ni siquiera indirectamente el movimiento de Garabandal, que nunca ha alentado o bendecido promotores o centros de Garabandal.  La Santa Sede lamenta el hecho de que ciertas personas e instituciones persisten en fomentar el movimiento en evidente contradicción con las disposiciones de la autoridad eclesiástica y así difundir la confusión entre la población, especialmente entre la sencilla e indefensa.

“De lo que se ha dicho hasta ahora se dará cuenta fácilmente que a pesar de esta Sagrada Congregación ciertamente está de acuerdo con el contenido de la nota de 10 de mayo, 1969 (publicado en varios países y en especial en la revista francesa LA DOCUMENTACIÓN CATHOLIQUE del 21 de septiembre 1966, n:. 1547 p 821) Debe decirse que es inexacto atribuir la parte del texto que se refiere a la falta de carácter sobrenatural de los acontecimientos de Garabandal de la Sagrada Congregación, que siempre ha luchado a abstenerse de cualquier declaración directa sobre la cuestión precisamente porque no consideró necesario hacerlo después de las decisiones claras y expresas del Obispo de Santander. Este es el verdadero significado de la carta escrita el 21 de enero de 1970 por el Reverendo Paul Phillippe, Secretario de esta Sagrada Congregación el editor en jefe de LA DOCUMENTACIÓN CATHOLIQUE.

“Con el fin de contribuir aún más a su acción pastoral en este asunto, esta oficina está anexando otros documentos esenciales ya publicados en otros países, como España: Los dos comunicados del Obispo de Santander, dos cartas de la Sagrada Congregación para el mismo Obispo y una carta al Delegado Apostólico en México. Esta oficina espera en esta carta que ha aclarado una cuestión que afecta no sólo su Arquidiócesis, sino también otras diócesis.

“Con sentimientos de profunda estima y cordial respeto que soy devoto suyo,

Francis Cardenal Prefecto Seper


sábado, 19 de abril de 2014

Anna Catalina Emmerich - Profecías





Visiones de Ana Catalina sobre los últimos tiempos, los demonios han manifestado en exorcismos su rechazo y terror por los escritos de esta Beata al igual que los de María de Agreda y la Imitación de Cristo de Kempis, razón por la que todos debemos conocer de ellos, para quienes no tienen el tiempo de leer les dejamos algunos videos con el audio. Paz y bien.


viernes, 18 de abril de 2014

Simbología de la película La Pasión de Cristo

1) CLAVES DE INTERPRETACIÓN DE LA PELÍCULA
* El tema de trasfondo es la celebración eucarística. (Última Cena: lavatorio de los pies y la consagración del pan y el vino que es su Cuerpo entregado por nosotros y su Sangre derramada para nuestra salvación)
* El punto clave de la película es la decisión de Cristo de salvarnos cumpliendo la voluntad del Padre. (Si por la desobediencia de Adán y Eva entró el pecado en el mundo así por la obediencia heroica de Cristo hemos sido redimidos. Cristo da su vida para salvarnos. Es un amor auténtico hecho donación hasta el extremo).
*Aparece el amor tan grande que Dios nos tiene: Dios Padre (la oración incesante de Cristo está dirigida siempre al Padre y, cuando muere en la Cruz, cae una lágrima desde el cielo que se convierte en el origen de un terremoto) y Dios Espíritu Santo (aparece en forma de paloma durante el juicio dando consuelo y fortaleza a Jesús).
Desde esta contemplación del amor incondicional de Dios se debe valorar la Iglesia que es la custodia y administradora del Misterio de la Redención por deseo de Cristo.
* El pecado y sus consecuenciasaparecen con viva claridad (Desde el inicio se percibe un ambiente denso y pesado. Es el pecado el que provoca angustia a Jesús).
2) REFLEXIONES SOBRE ALGUNOS PERSONAJES Y SÍMBOLOS
- PERSONAJES:
Cada personaje refleja una actitud concreta ante el plan redentor de Cristo(Él va convirtiendo a todos los corazones sencillos y abiertos que encuentra a su paso, mientras que el corazón de los soberbios se resiste a su amor)
+ LA SANTISIMA VIRGEN MARIA, SU MADRE.


 (Su relación con Jesús es maravillosa y muestra a María como un espejo de las actitudes de su Hijo- su aceptación del plan de Dios, su amor a todos, su dependencia absoluta del Padre)
+ EL DIABLO 


(aparece como un personaje real que intentará que Cristo no acepte su Pasión porque sabe que de ello depende la salvación de todos. Se dedica a suscitar desconfianza y odio contra Cristo. Su característica principal es la de ser seductor. Es una artista a la que le han quitado las cejas y el pelo, su voz es masculina, en ocasiones no se sabe si es mujer u hombre. Se ve cómo el demonio presenta el mal como algo atractivo y bueno. Para evitar que se confundiera a este personaje con otro, Mel Gibson utilizó efectos especiales que no dejan lugar a dudas (la serpiente, por ej.) En una de las escenas de la flagelación aparece como una mujer con un niño en brazos, símbolo de una cosa hermosa y buena, sin embargo el niño es un monstruo con la cara de uno de los soldados que golpean a Cristo: simboliza cómo el padre de la mentira disfraza el mal como algo bueno y también que el demonio tiene hijos, seguidores, son los hijos de las tinieblas)
+ EL CIRENEO (refleja la actitud de muchos hombres ante la cruz. En un primer momento, la rechaza. Poco a poco la va cargando con más gusto; al final, lleva no sólo la cruz sino también a Cristo. Incluso, rehúsa apartarse, separarse de Cristo. Este personaje es un argumento en contra del antisemitismo del que se acusa a la película pues el pueblo judío participa también activamente en modo positivo.
+ OTROS: EL CENTURIÓN (se convierte gracias al ejemplo de la Santísima Virgen María), MARIA MAGDALENA (va aceptando la Cruz gracias al testimonio de la Madre de Cristo), PONCIO PILATO (es el ejemplo de un hombre que quiere ser bueno pero, por cobardía, no pone los medios para lograrlo), EL BUEN LADRÓN (muere junto a Cristo y descubre detrás del Cristo sufriente, sangrante, sin milagros, al Salvador), EL OTRO LADRÓN (le ataca un pájaro y lo deja ciego muestra la ceguera de los hombres sin fe),HERODES (es un paradigma de la sensualidad, del placer, de la vida mundana que le impide ver, descubrir a Dios), JUDAS (después de la traición aparece restregando sus labios en una pared; al final, le sangran. Es un gesto que denota su sufrimiento interior y el deseo de limpiarse de aquel beso traidor con que entregó a su Maestro. También aparecen unos niños que le atormentan: ha perdido la inocencia y le remuerde la conciencia), JUAN (llama mucho la atención pues no dice nada en toda la película pero siempre está donde debe estar. Es la figura del discípulo fiel)
- SÍMBOLOS:
+ LA SANGRE (tiene un significado muy importante. Se acusa a Mel Gibson de haber exagerado los efectos pero lo cierto es que se utilizó la Sábana Santa como modelo y tan sólo se tomó un 40% de las llagas que en ella figuraban porque hubiera sido demasiado incluirlas todas. El valor de la sangre es doble: 1º Por la importancia que tiene en la cultura judía- la sangre es la vida. 2º Por lo que significa la sangre redentora de Cristo. María aparece manchada de la sangre de Cristo, participa de la misión y del dolor de su Hijo. Un centurión se convierte cuando le salpica la sangre…)
+ EL FUEGO (aparece como símbolo del infierno y también como elemento purificador)
+ EL AGUA (viene presentada como consuelo, pureza, fuente de vida).
3) OTROS COMENTARIOS
Sobre el plan de salvación y nuestro papel en él
-El pecado y sus consecuencias. Muchas personas que han visto la película han estado pidiendo perdón a Dios por sus pecados o han experimentado una fuerte repugnancia hacia el origen de todos los pecados: la desobediencia a Dios, la soberbia. Cristo está muriendo por los pecados de todos. Ofenderle a Él es también ofender a María, su Madre que lo acompaña en el camino.


-La película contiene un mensaje de esperanza. No debemos temer nada puesto que Dios nos ha amado hasta el extremo y María nos acompaña siempre en el camino. La Cruz es el inicio de esa tierra nueva de los redimidos, de los que creen en Él (después de la crucifixión María aparece tirando un puñado de tierra al suelo. Cristo, camino del Calvario había dicho que haría nuevas todas las cosas.)
Sobre la persona de Cristo
No existe otro Cristo sino el Crucificado. No se puede amar a Cristo sin aceptar también su camino de Redención. En Él se cumplen las Sagradas Escrituras. Él es el Mesías, el Redentor. Él abraza su Cruz por amor y acepta el plan de Dios Padre incondicionalmente. Su persona es atractiva y humana, muy cercana a nosotros. Este mismo Cristo es el que encontramos en la Eucaristía.
Sobre la persona de María y su relación con Cristo
María aparece como intercesora, la que da fortaleza, la que acompaña en todo momento y circunstancia. Su actitud ante el plan de Dios disponible e incondicional, llena de amor y de fe. Participa en su plan de salvación siendo la Madre de todos los hombres y mujeres.


La película comienza directamente y termina con el mismo título: La verdadera pasión de Cristo no pasa, es actual y se prolonga en nuestras vidas después de haber contemplado esta película.


Si quieres saber más datos, pincha en esta página:
http://www.aciprensa.com/reportajes/passion.htm

jueves, 17 de abril de 2014

LA PASIÓN DEL SEÑOR O Las Siete Palabras de Nuestro Señor Jesucristo en la Cruz


El sermón de las Siete Palabras

Esta devoción consiste en reflexionar en las últimas siete frases que pronunció Jesús en la cruz, antes de su muerte.

Primera Palabra

"Padre: Perdónalos porque no saben lo que hacen". (San Lucas 23, 24)

Jesús nos dejó una gran enseñanza con estas palabras, a pesar de ser Dios, no se ocupó de probar su inocencia, ya que la verdad siempre prevalece. Nosotros debemos ocuparnos del juicio ante Dios y no del de los hombres. Jesús no pidió el perdón para Él porque no tenía pecado, lo pidió para quienes lo acusaron. Nosotros no somos nadie para juzgar. Dios nos ha perdonado grandes pecados, por lo que nosotros debemos perdonar a los demás. El perdonar ayuda a quitar el odio. El amor debe ganar al odio. La verdadera prueba del cristiano no consiste en cuánto ama a sus amigos, sino a sus enemigos. Perdonar a los enemigos es grandeza de alma, perdonar es prueba de amor.


Segunda Palabra

"Yo te aseguro: Hoy estarás conmigo en el paraíso". (San Lucas 23,43)

Estas palabras nos enseñan la actitud que debemos tomar ante el dolor y el sufrimiento. La manera como reaccionemos ante el dolor depende de nuestra filosofía de vida. Dice un poeta que dos prisioneros miraron a través de los barrotes de su celda y uno vio lodo y otro vio estrellas. Estas son las actitudes que se encuentran manifestadas en los dos ladrones crucificados al lado de Jesús: uno no le dio sentido a su dolor y el otro sí lo hizo. Necesitamos espiritualizar el sufrimiento para ser mejores personas. Jesús en la cruz es una prueba de amor. El ladrón de la derecha, al ver a Jesús en la cruz comprende el valor del sufrimiento. El sufrimiento puede hacer un bien a otros y a nuestra alma. Nos acerca a Dios si le damos sentido.

Tercera Palabra

"Mujer, ahí tienes a tu hijo. Ahí tienes a tu Madre". (San Juan 19, 26-27)

La Virgen es proclamada Madre de todos los hombres.

El amor busca aligerar al que sufre y tomar sus dolores. Una madre cuando ama quiere tomar el dolor de las heridas de sus hijos. Jesús y María nos aman con un amor sin límites. María es Madre de cada uno de nosotros. En Juan estamos representados cada uno de nosotros. María es el refugio de los pecadores. Ella entiende que somos pecadores.


Cuarta Palabra

"Dios mío, Dios mío, ¿por qué me has abandonado?" (San Marcos 15, 34)

Es una oración, un salmo. Es el hijo que habla con el Padre.

Estas palabras nos hacen pensar en el pecado de los hombres. El pecado es la muerte del alma. La bondad es el constante rechazo al pecado. El pecado es el abandono de Dios por parte del hombre. El hombre rechazó a Dios y Jesús experimentó esto.

Quinta Palabra

"¡Tengo sed!" (San Juan 19, 28)

La sed es un signo de vida. Tiene sed de dar vida y por eso muere.

Él tenía sed por las almas de los hombres. El Pastor estaba sólo, sin sus ovejas. Durante toda su vida Jesús había buscado almas. Los dolores del cuerpo no eran nada en comparación del dolor del alma. Que el hombre despreciara su amor le dolía profundamente en su corazón. Todo hombre necesita ser feliz y no se puede ser feliz sin Dios. La sed de todo hombre es la sed del amor.

Sexta Palabra

"Todo está consumado". (San Juan 19, 30)

Todo tiene sentido: Jesús por amor nos da su vida. Jesús cumplió con la voluntad de su Padre. Su misión terminaría con su muerte. El plan estaba realizado. Nuestro plan no está aún terminado, porque todavía no hemos salvado nuestras almas. Todo lo que hagamos debe estar dirigido a este fin. El sufrimiento, los tropiezos de la vida nos recuerdan que la felicidad completa solo la podremos alcanzar en el cielo. Aprendemos a morir muriendo a nosotros mismos, a nuestro orgullo, nuestra envidia, nuestra pereza, miles de veces cada día.


Séptima Palabra

"Padre, en tus manos encomiendo mi espíritu". (San Lucas 23, 46)

Jesús muere con serenidad, con paz, su oración es de confianza en Dios. Se abandona en las manos de su Padre.

Estas palabras nos hacen pensar que debemos de cuidar nuestra alma, no sólo nuestro cuerpo. Jesús entregó su cuerpo, pero no su alma. Devolvió su espíritu a su Padre no con grito de rebelión sino con un grito triunfante. Nadie nos puede quitar nuestro espíritu. Es importante recordar cual es nuestro destino en al vida para no equivocarnos de camino a seguir. Jesús nunca perdió de vista su meta a seguir. Sacrificó todo para alcanzarla. Lo más importante en la vida es la salvación de nuestras almas.


La Virgen de la Soledad

Virgen de la Soledad

Bajo el título de la Virgen de la Soledad, se venera a María en muchos lugares y se celebra el viernes santo.

El Viernes Santo se acompaña a María en la experiencia de recibir en brazos a su Hijo muerto con un sentido de condolencia. Se dice que se le va a dar el pésame a la Virgen, cuya imagen se viste de negro ese día, como señal de luto.

Acompañamos a María en su dolor profundo, el dolor de una madre que pierde a su Hijo amado. Ha presenciado la muerte más atroz e injusta que se haya realizado jamás, pero al mismo tiempo le alienta una gran esperanza sostenida por la fe. María vio a su hijo abandonado por los apóstoles temerosos, flagelado por los soldados romanos, coronado con espinas, escupido, abofeteado, caminando descalzo debajo de un madero astilloso y muy pesado hacia el monte Calvario, donde finalmente presenció la agonía de su muerte en una cruz, clavado de pies y manos.

María saca su fortaleza de la oración y de la confianza en que la Voluntad de Dios es lo mejor para nosotros, aunque nosotros no lo comprendamos.

Es Ella quien con su compañía, su fortaleza y su fe nos da fuerza en los momentos del dolor, en los sufrimientos diarios y pidámosle la gracia de sufrir unidos a Jesucristo, en nuestro corazón, para así unir los sacrificios de nuestra vida a los de ella y comprendamos que en el dolor, somos más parecidos a Cristo y capaces de amarlo con mayor intensidad.

La imagen de la Virgen dolorosa nos enseña a tener fortaleza ante los sufrimientos de la vida. Encontremos en Ella una compañía y una fuerza para dar sentido a los propios sufrimientos.

Se le puede cantar a la Virgen la siguiente canción:

En el sufrimiento
supiste callar,
y junto a tu hijo
enseñas a amar.
Un Viernes Santo, con gran dolor,
sufre en silencio junto al redentor;
desde esa hora, hora de cruz,
es nuestra Madre, nos la dio Jesús.